El ajuste quiropráctico generalmente consiste en un ajuste manual, es decir un movimiento de presión con las manos, y en ocasiones se hace uso de instrumentos como el activador.
Durante el Ajuste las vértebras subluxadas son alienadas y regresan a su posición restableciendo el flujo nervioso, adquiriendo el máximo potencial de curación.
Cuando la columna se restablece a través de los ajustes quiroprácticos, las irritaciones a lo largo de la médula espinal tienden a desaparecer o disminuir de forma que el sistema nervioso funcione sin interferencias restableciendo la vitalidad del cuerpo.
La Quiropráctica ha mostrado beneficios y mejoras en diversas condiciones:
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Problemas musculo esqueléticos: lumbalgias, hernias discales, escoliosis, migrañas, vértigos
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Problemas orgánicos: asma , estreñimiento, cólicos
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Problemas emocionales: depresión, ansiedad, hiperactividad.
