Por otro lado en el centro de quiromasaje de las Rozas de Madrid, según el tipo de movimiento que realice el profesional, podemos ofrecer múltiples soluciones específicas para cada dolencia a base de masajes expertos, los más habituales son:

• Amasamientos: el profesional realiza el masaje con las palmas de las manos, los nudillos o dedos, incidiendo directamente, tanto en la zona afectada como en las colindantes. Así se logra la mejor recuperación de la molestia.
• Vibraciones: Permiten estimular periféricamente el sistema circulatorio, calmando eficientemente la zona dolorida o molesta, gracias a toda una serie de vibraciones controladas por medio de presión estática en un punto particular con intensidad rítmica variable. Es habitual para el quiromasaje deportivo, donde los profesionales consiguen que la zona dolorida deje de molestar (o mucho menos).
• Percusión, claping o cacheteo: Gracias al cual y realizando pequeños y controlados golpecitos en la parte señalada, se comprime la piel, la zona cutánea inferior y los músculos colindantes. Es uno de los que más fuerza intensa se realiza, generando una suave presión con un ligero estiramiento para que el músculo vuelva a su posición original, sin tensiones.
• Sacudidas: Otra variante de la vibración, suavizando y relajando la zona afectada, el profesional quiromasajista relajará los músculos afectados jugando con las articulaciones, alivia eficientemente la tensión en brazos, piernas y acelera la circulación periférica, restableciendo así el mejor tono muscular del paciente.
• Fricción: Su principal objetivo es mover los músculos superficiales frente a los más profundos, permitiendo la movilización de ambos y así ajustar (gracias a una presión controlada) ambos y así aliviar el dolos y las molestias musculares.
• Picoteos: Un tipo de quiromasajes utilizado únicamente en la zona facial, estimula el sistena nervioso y logra recuperar el tono muscular, logrando una mejor apariencia muscular facial.
• Pellizcos: El uso de pequeños y controlados pellizquitos en la piel y el músculo, se consigue adelgazar, drenar linfáticamente mejor el organismo y aliviar presión en la columna vertebral. Es recomendable para ello un tratamiento quiropráctico.
• Compresión: realizando toda una serie de compresiones dirigidas en determinadas zonas específicamente definidas por el quiromasajista hace que el músculo en tensión constante, pueda volver a su estado original, aliviando eficazmente la molestia y el dolor punzante y puntual.
• Roces: Uno de los movimientos más habituales en los quiromasajes, rozando y deslizando la mano, palma o brazo sobre la piel, consigue estimular eficazmente el riego sanguíneo de la zona tratada y drenar linfáticamente de forma eficiente, consiguiendo así una mejoría.
• Presiones: Una serie de presiones controladas en zonas precisas, zomo son la zona coronaria, torácica u ocular, alivia con gran eficacia la tensión nerviosa en tratamientos anti estrés.
• Torsiones: Por medio de un movimiento preciso de cizallamiento se elimina la fuerte tensión muscular, usando un medio deslizante se logran excelentes resultados. Es idóneo para generar un tratamiento descontracturante en zonas problemáticas.